La Noche de ojos
maquillados, es embustera de profesión,
No conoce
corazón alzado, no entiende pañuelo de estación.
La Noche de ojos
maquillados jamás cierra los ojos al besar,
Solo presta
labios usados, solo susurra una canción.
Siempre anda
acompañada, siempre encuentra un espacio en cada atajo de pensión.
Símbolo
inocuo... De perspectiva variable.
Corazón fugaz que no pertenece a nadie.
La Noche de ojos
maquillados, es embustera de profesión,
Vomita para ti
toda la mentira que mastica junto con mis huesos, bautiza de cariño su capricho
y jura que era verdad la gloria de entregarte la vida toda.
Pero hoy un
crucigrama, un almuerzo sin sal... Un libro que no termino de leer, una tarde
de cielo nublado; confirma mi posición. Aun hago la cama pensando en ella, en
sus ojos maquillados. Aún tengo ganas de salir corriendo y llegar con ella, aun
creo que creía en algo.
Implícito queda.
Que lo que fui, en ti queda plasmado.
No importa la
careta que esconda tu rostro; Yo colecciono sonrisas, pero las lágrimas ocupan
mucho espacio tras su huida anticipada al amanecer.
La Noche de ojos maquillados, es embustera de profesión,
No conoce
corazón alzado, no entiende pañuelo de estación.
Materia
inconclusa la Noche de ojos maquillados, pendiente que traza la línea del resto
de nuestros días. Interesante, este malestar tan preservado y esta ilusión tan
desilusionada, la Luna menguada tras el balcón del ayer es su residencia más gastada.
Extranjero de mi mente, de su corazón.
Extranjero de
todo el mundo desde que ya no amanece en mi colchón. La Noche de ojos
maquillados, es embustera de profesión,
No conoce corazón alzado,
No entiende pañuelo de estación.