Hoy desperté y así me entero, con un nudo en la garganta ahora ESTOY LLORANDO; Llanto de rabia, Llanto de tristeza y de indignación…! Es irreparable e inconcebible tu pérdida Maestro.
En un mundo tan necesitado del arte del amar, un golpe en el centro del alma hemos recibido y la matriz de la inspiración a sido conmovida a tal punto que las lagrimas se nos agotan.
La tiranía de la oscuridad que pretende borrar de nuestro corazón lo bueno, hoy se ríe en sonido estruendo de balas, y la vergüenza tiñe y enluta a un país que le debe al universo una existencia tan invaluable que no podrá ser reemplazada con nada. Nos han robado una gran fuente de esperanza, la filosofía que nos inspira, la risa que nos alivia en un acorde de guitarra.
Queríamos Cambiar al Mundo y no lo Conocíamos… -dijo el maestro-
Entonces pienso y recapacito, y entiendo con lágrimas y corazón compungido, que FACUNDO CABRAL, siempre fue un hombre Universal, un ser capaz de ver mas allá de la podredumbre que inventamos al desechar el corazón eligiendo lo material, con la indiferencia maldita entre nosotros mismos, comprendo ahora que El Grande Maestro no habría clamado sumido en reproches, ni hubiese gritado venganza mas por el contrario de la tragedia una comedia hubiera en un hermoso verso sacado; pues nunca sangre exigió de pago, mas bien bendita Música otorgo a la humanidad de regalo. Nos mataron al hombre al Poeta, pero nunca, nunca tal atrocidad nos quitara la Luz que nos regalaste…
Te extrañaremos siempre maestro, cantaremos tu obra como siempre quisiste y Tú mensaje vivirá con nosotros para transformar a este mundo, a esta humanidad.
Hoy las guitarras no tienen ganas de sonar, esta noche las estrellas del cielo han perdido una luminaria, pero una Leyenda vivirá para siempre porque el regalo de la Música es mas poderosa y sagrada que cualquier ser humano que cualquier tragedia y ese poder ya esta con nosotros, gracias Maestro por tanto que nos diste…
Por eso exclamo sin miedo y a viva voz:
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